martes, 15 de enero de 2013

EL HÉROE DE GERMÁN PARDO GARCÍA


Por lo regular, hablar de heroísmo significa hablar de aquel personaje extraordinario con cualidades fuera de lo común y totalmente distanciado del humano que sufre, ama y muere. Así son, por ejemplo, los héroes antiguos-míticos que se mencionan en los cantares de gesta. Hombres que se valían de la fuerza, la sagacidad y la valentía para ser merecedores de tan importante apelativo. Sin embargo, con la llegada de la era moderna, esta concepción ha mutado para forjar un nuevo héroe. “La telaraña del sueño mítico cayó, la mente se abrió a la íntegra conciencia despierta, y el hombre moderno surgió de la ignorancia de los antiguos, como una mariposa de su capullo o como el sol del amanecer surge del vientre de la madre noche” (Campbell, 1972, p. 212).
Por tal motivo se constituyen nuevas cualidades que hacen posible el nuevo héroe. Una de ellas es asumir distintas perspectivas. Partiendo de la consigna que no sólo se es valiente cuandose arriesga la vida o se derrama sangre en defensa de una nación. Porque esta posición muchas veces resulta derivar en despotismo que  en un acto heroico: “La hazaña del héroe moderno debe ser la de pretender traer la luz de nuevo a la perdida Atlántida del alma coordinada” (Campbell, 1972, p.212). No ir en busca de hazañas que ya no caben en un mundo donde todo va deprisa, el individualismo reina y la filosofía global es la producción y el consumo.
En este sentido, el Poemario del ibaguereño, German Pardo García, titulado El héroe manifiesta una perspectiva distinta acerca del heroísmo, es una visión detractora de lo que se conocía como héroe. Porque el héroe de Pardo refleja su posición desde un punto de vista objetivo, ya no es aquel que se involucra de cuerpo ante la adversidad sin importar las consecuencias, como sucedía con Aquiles, Ulises o Siegfried. Este desde lo lejos analiza el mundo y recoge diferentes miradas, y así con la idea, la conciencia y la espiritualidad logra salvar al hombre de las fauces de la guerra, el consumo y contaminación.
Oídme, escuchadme oíd: os habla el héroe evadido de la catástrofe de la tierra, desde un galáctico satélite de Orión. Tardé una vida-luz en llegar a esta frontera del universo, donde  ya las ideas son visibles y la mente equilibrio del espacio. (Pardo, 1975, p. 9)
En el fragmento anterior, se refleja con claridad que este héroe ha abandonado la tierra, y lo hace por un motivo: “evadir la catástrofe”(Pardo, 1975, p. 9). No obstante, su lucha se efectúa desde la constelación de Orión, haciendo aviso a la humanidad de los aspectos que entorpecen y destruyen el planeta. Pero no sólo es aquel llamado insulso, carente de sentido, sino por el contrario es un mensaje contundente hecho desde la apreciación sabia y artística.
Una de las situaciones que producen aquellas abominaciones en la tierra son las religiosas. Por lo tanto, el héroe hace un llamado a la humanidad, porque muchas de las guerras y derramamiento de sangre  son a causa de este fenómeno. La voz poética reitera “romped el santo grial” (Pardo, 1975, p. 10), como súplica inminente de la salvación terrenal.
(…) ¡Sabed, Yo tengo mis leyes geoquímicas! ¡Ya depuré con ellas a las enfermedades y al rostro senescente de la culpa! ¡Tuve un infierno personal y construí mi propio paraíso!¡Romped el santo grial romped el santo grial y dale un nuevo corazón al mundo!                                                                                        ¡Ah de los que escucháis arrodillados ante las aras de los templos:pangue lingua pangue lingua! Y al escéptico triste que proclama: ¡no hay más que vanidad de vanidades!                                                                         Desde mi paganismo esférico respondo: ¿no ves la rotación de la materia? solo hay eternidad de eternidades. (Pardo, 1975, p. 14).
El santo grial entre otras cosas fue un producto bélico que ocasionó diversas matanzas y guerras sin sentido, aquellos que lo cuidaban creían llevar la sangre de Cristo. Su ruptura representa la desaparición del enajenamiento religioso que durante siglos domina la humanidad. De igual forma, en estos poemas se haya una relación directa con la química, la materia que finalmente es lo que perdura y que representa como una nueva religión. Sólo el ser material es el que tiene el encuentro con la salvación, aunque, el héroe no precisa qué clase de materia es. ¿Podría ser la carne misma del hombre? o ¿el legado que puede dejar en el mundo como ciudades e inventos de modernización?
Tal vez sean ambas o quizás no, pero lo que si se esclarece en el poemario es que el héroe no necesariamente se representa como un ser material, también se hace desde el ideal colectivo, buscando soluciones inteligentes para huir de la catástrofe, sin perder la espiritualidad, pero a su vez no siendo dependiente de un dios, porque es de tener en cuenta que “ya no existe la clase de sociedad de la que los dioses eran soporte” (Campbell, 1972, p.212).
Uno de los poemas  se titula “El Héroe en Auschwitz”, la ciudad de Polonia donde cientos de judíos fueron asesinados. Es interesante ver como se hace mención al holocausto Nazi donde miles de personas murieron sin tregua, es una tragedia que sin duda necesitó de un héroe. Desde la posición de héroe moderno, los héroes del holocausto no serían las fuerzas aliadas como históricamente se cree, los verdaderos héroes fueron todos aquellos que desde una situación de impotencia surgieron y construyeron una nueva mentalidad.
Se hace  entonces la denuncia: una guerra más para la modernización del mundo, cada uno con su héroe, los judíos tuvieron que sentirse héroes por aguantar, “los alemanes por ser una raza superior” y las fuerzas aliadas porque “detuvieron una catástrofe mundial”. Pero el héroe que ve todo desde un punto lejano observa que no hay héroe  más que la sangre de inocentes corriendo por las calles.
¿Dónde estabas oh Dios de los profetas? te llamaban Dios de las batallas y era verdad: ¡terrible combatías! Cristo: ¿cuál fue tu angustia comparada con la de los campos de concentración? ahí la sangre se volvió cianuro.(Pardo, 1975, p. 30).
De esta manera, el escritor German Pardo García tiene en este poemario una actitud profética del mundo, teniendo en cuenta el contexto en el que se creó los poemas. Aparte de que logra ubicar al lector en un mar de metáforas que enseñan con mayor claridad la perspectiva de héroe. Son poemas en prosa en los que se yergue un contenido estético significativo y aunque el léxico es antiguo, se esclarecen aspectos modernos como el impacto de la tecnología y la ciencia.

PAUL RIAÑO SEGURA

REFERENCIAS:
Campbell, J (1972) El héroe de las mil caras, psicoanálisis del mito. México. Fondo de cultura económica.
Pardo García, G (1975) El héroe. México. Libros de México.

FICHA TIPOGRÁFICA
Libro: El Héroe
Autor: Germán Pardo García
Editorial: Libros de México
Año: 1975